El término “fake news” viene acompañando a nuestras conversaciones desde hace relativamente poco a pesar de que las noticias falsas son algo que lleva con nosotros antes incluso de la aparición de la prensa.
Lo realmente nuevo es el fenómeno que hay detrás y el negocio basado en mentiras y su difusión a gran escala. Y es que, cada vez es mayor el número de personas que se informa a diario en internet y que comparten con la misma frecuencia millones de publicaciones en plataformas como Facebook, Whatsapp, Twitter o Instagram, de forma que las fake news ya forman parte de nuestro día a día.
Estas noticias falsas tienen dos características principales; la primera es que aparecen en forma de noticias reales y la segunda es que tienen unos objetivos definidos, generalmente económicos e ideológicos y en ocasiones personales.
El principal problema de las fake news es que se difunden a una velocidad vertiginosa y pueden extenderse por todo el mundo en pocos segundos, por lo que la cobertura es mayor que la veracidad de la información.
Debido a esto, las empresas y organizaciones no se han librado de ser el foco de este tipo de manipulación y corren el peligro de ver su reputación afectada. De aquí, que una de las tendencias en gestión de intangibles del último informe de “Approaching the future” sea la gestión de la reputación en la era del algoritmo.
Aquí te traemos unos consejos para actuar ante esta situación:
1. Practicar la transparencia.
Esta práctica debe de ser una de las más reconocibles de toda marca, ya que si el público peribe una noticia falsa es más probable que desconfíen de esta si están acostumbrados a que tu empresa no oculte nada a sus clientes. Por tanto, se ha de procurar comunicar de forma clara y directa así como reconocer los errores que sean necesarios y contar con un canal directo abierto a la conversación con los usuarios.
2. Anticiparse.
No te confíes en que algo así no te pueda pasar, por muy pequeña que sea tu empresa puede verse envuelta en un escándalo por este tipo de noticias. Por tanto, es aconsejable contar con un plan de crisis para saber cómo actuar en caso de que llegue a ocurrir. En este, puedes plantearte qué noticias te podrían afectar o en cuáles podrías verte relacionado y contemplar qué respuesta dar, a través de qué canal e incluso quién debería ser el portavoz. Esto podría ayudarte a dar una respuesta rápida que frenara la propagación del bulo.
3. Tener prescriptores.
Los clientes habituales y los trabajadores son los principales prescriptores de la marca y pueden ser también un gran refuerzo a la veracidad de la información. También, puedes buscar apoyo en los líderes de opinión y en los influencers de tu sector porque ellos también cuentan con la confianza del público.
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